Cuyo título honra la pronunciación hebrea de Jehová, parte de la premisa bíblica que explica que, al mencionar Su nombre, hay sanidad y resurrección.
Con una melodía dulce, íntima y familiar, esta balada invita al corazón a adorar al Rey de Gloria, sin reservas ni condiciones.
Dirigido por Gabriel Dávila-Luciano de Dexios Design Films, el video musical representa una poderosa y emotiva historia de la vida real, la cual confirma que Él es el mismo ayer, hoy y por siempre.
